Antonio Colomer Viadel
Sea este título del “A modo de presentación”, una vez más, una reafirmación de mi fe municipalita y la convicción, compartida por tantos estudiosos de que el salto de la barbarie a la civilización se da con la aparición de la ciudad. Allí nace la política, la democracia y también el arte, la cultura, el mercado y el derecho en sus formas ya más articuladas y regladas, así como la enseñanza, la educación y la ciencia.
Un estudio de la historia de nuestra revista que sería de interés consistiría en constatar las veces que hemos relacionado ciudad y ciudadanía con la cultura, la política y el nacimiento de la democracia, así como en los estudios sobre la ciencia, las manifestaciones de la economía y el intercambio comercial, la articulación de oficios y profesiones, la aparición de la Universidad y lo que implica de estudio sistemático de las ciencias humanísticas, jurídicas, sociales y naturales, y la regulación del poder y sus límites, además de la participación de los ciudadanos en el mismo.
Recuerdo que antes de que en octubre de 1983 publicáramos el primer número de RIDAA, en un tríptico anunciador de sus próxima publicación, ya decíamos en él, que incluíamos una pequeña declaración sobre nuestro punto de partida e intenciones y propósitos (…) y entre tales propósitos y fines, decíamos en un párrafo lo siguiente: “Queremos entroncar en el ámbito de nuestra cultura mestiza, por ibérica y americana, con aquella profunda tradición comunal de nuestros municipios y cabildos, de las organizaciones campesinas capaces de regirse a sí mismas en comunidades de hombres libres, que rechazaban tanto lo insolidario como lo gregario, de los movimientos comuneros de ambas orillas del Océano, adelantados de esa búsqueda de la libertad que es compañera cotidiana y no abstracta quimera”.
No fue esta una declaración retórica porque nos hemos dedicado a bucear, no sólo en teorías y pensamientos abstractos sino en experiencias vivas en todos los números de nuestra revista y muchas de ellas, como las que hoy publicamos en este número, se refieren a casos que entroncan vivencias locales y municipales con prácticas cooperativas y solidarias, y proyectos de desarrollo, tanto en el campo próximo a la ciudad –a la que provee de alimentos- como en organizaciones industriales, artesanales, científicas, de espíritu solidario.
Y en los Estudios Gerardo Cárdenas nos ilustra, de nuevo, sobre los factores para un mayor desarrollo local, o el desafío “glocal” que abordan Rodolfo Hernández Carrión y Mercedes Díaz.
No puedo olvidar lo que supuso cooperar a la creación de la Federación de Municipios Libres del Perú (FEMULP) y la elaboración de su Manifiesto fundacional, y dar noticia después de aquel año 2001 de su crecimiento y prácticas exitosas.
Recuerdo también que, en el invierno de 1999, -correspondía al número 33 de RIDAA- titulé el “A modo de presentación” de la siguiente manera: “El Rescate de la Ciudad para la Comunidad de hombres libres”. Ahora bien, si repasamos los índices de todos los números publicados, es casi imposible encontrar alguno en el que no se haga alusión, o referencia directa, a esta temática. Hoy, en este número 71-72, tratamos de esos procesos de autodesarrollo, como el caso del municipio de Paterna, en Valencia, o la cooperativa campesina ubicada en un municipio cubano o las estrategias colectivas locales de producción de café, en la tierra de Jalisco (México), o sobre la soberanía alimentaria, que siendo un tema agrícola, implica también resistencia cultural y participación popular, en otros municipios mexicanos.
Hay que aclarar enseguida que esta propuesta no es la de islotes autosatisfechos en su abundancia, o la de oasis aislados y cerrados para preservar una vida privilegiada, sino comunidades abiertas. En realidad, mancomunidades de apoyo mutuo y cooperación, que todo lo que pueden hacer juntas, para una economía de escala, lo ponen en marcha y trasfieren saberes locales de unos a otros, fieles a esa reciprocidad de dones que está en lo profundo de la cultura humana y que enaltece al más generoso en la donación y crea vínculos y enlaces fraternales entre unos y otros. Sólo este espíritu federativo y mancomunado tendría sentido, a la vez de mantener la dimensión de la escala del hombre, en la cohabitación que nos facilite un entorno próximo y conocido.
Las supermetrópolis o Megalópolis contemporáneas, atravesadas de tecnologías alienantes y habitadas por muchedumbres solitarias, son una forma de deshumanización, caldo de cultivos para todas las demagogias y todos los despotismos.
Habría, pues, que reencontrar la identidad de los barrios en la gran ciudad, dispuestos también a colaborar con los restantes barrios de la misma forma que cooperan los municipios en las mancomunidades de municipios, pero manteniendo ese entorno entrañable y conocido en el que no somos ni extraños ni solitarios irritados y entristecidos.
Cuando la Revista cumplió sus primeros 20 años, en 2003, publicamos un número extraordinario en el que ahora veo que el profesor israelita Yaacov Oved nos escribía sobre la actitud comparativa en el estudio de las comunas, o el peruano Johan Otoya analizaba la solución de conflictos en comunidades nativas, junto a tantos otros trabajos, incluido uno de Francisco Lizcano, referente a mi propia pasión autogestionaria.
Esta referencia al número 41-42, 43, del 20 aniversario (otoño 2003) entronca con algún comentario sobre las Noticias, Convocatorias y Libros que incluimos en el número actual.
También recuerdo que en el número 1 de RIDAA, al final, nos referíamos en un epígrafe a la “Conexión Portuguesa”, proclamando nuestra profunda fé iberista y que nuestra publicación recogería, junto a las colaboraciones en castellano, otras en lengua portuguesa. Se hizo así desde el principio, en la medida que recibimos estas colaboraciones. Debo citar en esta línea el número dedicado a Brasil –“Nuestro hermano, el gigante”- (número 24, de otoño de 1991), y en ese número del 20 aniversario, publicó un notable trabajo un gran amigo y académico portugués. que acaba de desaparecer, Manuel da Silva e Costa sobre “O Reencantamento da Organização: A Organização Participativa e a Mudança de Paradigma Científico”. Manuel fue un compañero y anfitrión excelente en su Instituto de Estudios Sociales, en la Universidade do Minho, que en dos ocasiones nos recibió en su ciudad de Braga, a los partícipes de la Asociación Iberoamericana de Sociología de las Organizaciones (AISO). Durante el mes de mayo de este año 2018 recibí un correo de Ivette, su esposa, dándome la noticia de su fallecimiento en febrero y que habían encontrado, después, el número que le envié de RIDAA (número 70, de 2017), dedicado a los Valores de El Quijote, con una nota mía cariñosa para Manuel. que Ivette me dijo que le hubiera encantado leer, pero ya no pudo. Descanse en paz.
Desgraciadamente la lista de los miembros del Consejo Editorial, desaparecidos, va creciendo. Nos dejan el recuerdo de su trayectoria y de su obra. También en Noticias publicamos la nota que elaboró Juan Guillermo Espinosa, sobre la muerte, el año pasado, del maestro Jaroslav Vanek, frecuente colaborador en nuestra revista y prestigioso miembro de su Consejo Editorial. A ella me remito y a lo que he escrito en una breve entradilla previa al valioso artículo del profesor Espinosa sobre su maestro, y el de todos nosotros, Jaroslav Vanek.
Por el contrario, nos alegra informar de la concesión del merecido Premio Gigante del Espíritu 2018 a eso animoso joven de 85 años, que es el profesor José Luís Abellán, maestro indiscutible de la historia del pensamiento español y de la idea de América. Además de una gran persona que ejerce un magisterio ético, no solo en su pensamiento sino también en su comportamiento[1].
El Convenio entre FLAPE e INAUCO con la Organización de las Mutuales de las Américas (ODEMA), se incluye también entre las noticias, ya que tal Convenio se firmó en Buenos Aires, el 26 de abril de este año 2018.
En las Convocatorias incluimos la primera noticia del III Congreso América Europa, que celebraremos del 26 al 28 de junio de 2019, y cuya información detallada pueden ver en www.congresoamericaeuropa.org
También Octavio Uña nos remitió la información sobre el XXIII Congreso de Sociología de la ACMS sobre el tema “Inseguridades y Desigualdades en Sociedades Complejas”, que tendrá lugar en Valdepeñas (Ciudad Real) el 9, 10 y 11 de noviembre de 2018. Y así lo publicamos.
Por último, en la sección de Libros y revistas, recogemos la referencia al número 21 de los Temas de Formación Socio Política, del año 2017 de la Fundación Centro Gumilla, de los jesuitas, en Venezuela, sobre “Municipios, vecinos, comunas. Mayor compromiso ciudadano con la comunidad municipal”, que elaboró José Gregorio Delgado Herrera y que resulta muy pertinente para este número de nuestra revista.
Por ello también hemos querido incluir en la portada la pintura de las campesinas peruanas del mundo andino, en dónde se ve, a lo lejos, un pueblecito (municipio) y en primer plano a estas mujeres afanosas y admirables recogiendo flores. Esa pintura, corresponde como tantas otras de nuestros artistas amigos, en las que el original está pintado con la boca, y el autor es Félix Espinoza Vargas. Todo un mensaje de exaltación de la vida y de superación que junto al recuerdo del legado que nos dejan nuestros compañeros y maestros desaparecidos, es el mensaje con el que quiero despedirme.
[1] El 24 de octubre de 2018 en la Facultad de Administración y Dirección de Empresas de la UPV, se entregará también el premio Gigante del Espíritu 2017 al diplomático italiano Enrico Calamai que vendrá en esta ocasión ha recibirlo ya que no pudo el año anterior por enfermedad.